En el caso muy particular, mi vida siempre fue guiada por la segunda opción, pues era mi trabajo obligado hacer sentir mal a las personas con comentarios ácidos que, si bien la mayoría de las veces eran ciertos, no tenia yo el derecho de decirlo. También basé mis momentos naturales concentrándome en la rabia que me daba el saber que no podía tener aquellas cosas materiales por mi situación. Pero eso no era lo mas grave, aunque así lo parezca; mi problema principal es mi enorme ego.
Mi ego es una concentración de mi persona pero mas grande y sale a relucir en cualquier momento, pues tengo la idea que el universo gira en torno a mi, pero ¿Que tan grave puede ser esto? He de confesar que bastante, pues normalmente a la mayoría de los seres humanos no nos gustan que nos hagan ver nuestros errores -y ese es uno de ellos- y parte de mi "egomanía" consistía en hacer que esos errores fueran mas evidentes ¿Porque? No lo se, pues no soy una mala persona, pero como todos cometo mis faltas y si he de ser totalmente franco disfrutaba haciéndolo igual como un niño disfruta un juego en el que esta ganando; la diferencia es que yo no estaba ganando, salvo el odio, el rencor y la tristeza de quienes me rodeaban.
Me convertí en una especie de cazador de fallos y me alimenté de sus errores y mas aún de sus enojos y corajes, la verdad no tenía ninguna motivación, lo que me movía era la fasinación de ver hasta donde el ser humano es capaz de sentir el filo de la espada en que se convierte su propia ignorancia.